viernes, 21 de mayo de 2010

Espera


Vuelvo a mirar el techo. Blanco.
Miro a Do. Siempre me escucha.

-¿Lo sabes, Do?

No responda, nunca lo hará.
Pero sabe lo que me pasa. Siempre
Y espero.

-Te contaré.

Un día, me llevaron a una linda habitación blanca.
Desde entonces, siempre estoy aquí.

Volví a tirar esos dulces. ¿Sabes por qué?
Porque saben horrible y me dan sueño.
También detesto el jugo, ese color naranja es lindo pero también es asqueroso.
Y los adultos...

-Los adultos son raros.

Hay uno con cara de bobo que insiste en que coma esa... Esa... Ni siquiera puedo decir correctamente esa cosa horrenda.
Además, no estoy sola.

En los lindos pasillos hay lindos cuartos.

Pronto será mi turno.

Cada noche se llevan a uno de nosotros.

Sin embargo, ¿sabes Do? La Señorita Mei me trata bien.
¡Es más! ¡Hasta me dio hojas y lápices para dibujar!

-Con esto, te divertirás hasta que mejores.

¿Ah? ¿Estoy enferma?
O tal vez crezco mucho... ¡A veces me doy cuenta de que el piso está cada vez más lejos y me asusto!

Pero bueno, me dijeron que pronto será mi turno.
Y espero.

Brotan lindas flores escarlatas.

Lo encontré de casualidad.
Y espero.
Dijeron que está prohibido.
La Señorita Mei me dijo que son flores.
Flores que no se despegan a menos que les eches agua.

Uno de los cuartos se vuelve un jardín de flores.

La señorita Mei me acarició el pelo. Es blanco.

-Mañana te tocará.

Mi turno.

Mañana me toca.
Estoy muy ansiosa.

Mañana será mi turno.
Y espero.
¿No estás feliz, Do?
Y espero.
Mi pelo se teñirá de rojo también.
Y espero.
Iré al jardín de flores ¡La Señorita Mei me llevará!
Y espero.
La próxima...
Seré yo.
Y espero.



Tais 3º "A"

No hay comentarios:

Publicar un comentario